Mi nombre y yo
si vamos de la mano
comemos chocolate.
Pero a veces la niña rota
hace de mi mirada cien encrucijadas
abre un paraguas para que caiga una lluvia
cenizas de aquello que arrasó mi casa.
hace de mi mirada cien encrucijadas
abre un paraguas para que caiga una lluvia
cenizas de aquello que arrasó mi casa.
El ratón de mi nombre pregunta
¿mi memoria vivirá
cuando yo integre sus paredes rotas?
¿Dónde quedará la emoción
¿Dónde quedará la emoción
si la niña muere?
Martillo con mi deseo el vidrio del paraguas
una emergencia que cuesta
serie tras serie tras serie
de ejercicios emotivos:
estar en otro
de ejercicios emotivos:
estar en otro
presentar el cuerpo
receptar el mundo
Aunque el cuerpo
el otro
el mundo
sólo desplieguen
ante mis ojos
ante mis ojos
fronteras de arena.
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