Ojalá fijáramos la brisa, o quedara grabada la emoción, o hubiéramos podido sujetar la luz a la palabra; pero luz, emoción, brisa se acurrucan apenas a los pies del poema, besan su frente y enseguida rompen sus lazos, libres. Quedan las huellas que la poesía nos lega cuando camina sobre la disímil materialidad del lenguaje. Nosotros, apalabrados, seguiremos en un viaje vital dentro de la certidumbre de aquello que nos elude. El tiempo se encargará de lo que quede

sábado, 2 de octubre de 2010

Del desconcierto asambleario.

Mucho menos sangrientas pero no menos feroces
comienzan otras tratativas particulares
en horas trágicas para nuestramérica.
Discutimos hasta las horas en que el fernet amplifica las palabras
trataremos durante dias poblados de fantasmas
el problema enfrascado entre signos de pregunta
que hoy ví decidido a escapar de la hoja en tinta.
Descubrí al vidrio habitante de esta porción nuca
en acto de doblarse
-el termómetro marcó 127 grados de circunferencia-
lo ví ceder el arenal de su trigo
como un arco iris que afinaba su mirada.
Desenredó un consenso en el recinto
la agenda de negociación
conjuga ahora como base
en tiempo, espacio, persona, número cercano
bajo modos alejados de alguna regla implícita
un modelo regular de biogramática.

No hay comentarios:

Publicar un comentario