A Samuel.
Que amamos cualquier vidao lloramos cualquier muerte
éso, es mentira:
la sangre es parte de los partos
se llama justicia la violencia del obrero.
No lloramos, compañero, a un genocida
a un traidor, a un explotador que por fin muere.
(ojalá matado).
Por eso, compañerito que te fuiste,
sí llora Córdoba tu triste ausencia.
Postrer homenaje, compañero:
el cielo fusila ante tu muerte.
a un traidor, a un explotador que por fin muere.
(ojalá matado).
Por eso, compañerito que te fuiste,
sí llora Córdoba tu triste ausencia.
Postrer homenaje, compañero:
el cielo fusila ante tu muerte.
Dulce, dulce dolor-reconocimiento bien a ras de tierra. Su vida, que valia mas que toda bandera, bien llorada Ceci. Un tesoro lo tuyo
ResponderEliminaresto lo escribí cuando murió Samuel.
ResponderEliminarViajaban en auto rumbo a córdoba. Unas camionetas que venían haciendo picadas se los llevaron por delante. Terrible.